Un encuentro entre los diferentes sabios

Todos los nuevos estudios y el nacimiento de nuevas ciencias tienen una base sólida en las afirmaciones realizadas en la antigüedad. Es interesante ver como los diferentes saberes pueden realizar una complementación interesante en este nuevo saber.

María Fernanda González M Psicóloga Consultora EFICIENTE-MENTE.

A veces creemos que las últimas teorías son aquellas que se vienen examinando recientemente; sin embargo si leemos sobre los grandes pensadores podemos encontrar cosas muy interesantes que aunque fueron enunciadas muchos años atrás, se han retomado en le presente y posiblemente con un soporte investigativo.

Cuando se empecé a profundizar sobre el tema de Inteligencia Emocional y empezar a escribir sobre el tema, encontré una cita enunciada por un gran sabio griego, que considero fue la primera persona que habló de este tema y fué Aristóteles. Una de sus grandes obras es la titulada La Etica de Nicómaco. En esta afirma: Cualquiera puede ponerse furioso; Eso es fácil. Pero estar furioso con la persona correcta, en el momento correcto, por el motivo correcto y de la manera correcta, eso ya no es tan fácil . Si desmenuzamos cada una de sus frases en esta cita podemos ver que implica varios de los componentes de esta inteligencia; el autocontrol y el autoconocimiento componentes de la Autoconciencia y las habilidades sociales es decir las herramientas para manejar las interacciones. El mundo de las relaciones implica tener estas habilidades presentes para poder crear redes sociales que nos sirvan de soporte en la vida emocional.

Es determinante el entender que el ser humano es definitivamente un ser social; la teoría de la supervivencia nos muestra que aquellos seres que se agruparon pudieron salir adelante en las adversidades de los innumerables cambios; adicionalmente, el entender que nuestro cerebro está estructurado de tal manera que podemos leer las señales más sutiles de la comunicación para generar la comprensión y el entendimiento. Es así como el recién nacido es capaz de seguir con la mirada principalmente al padre, o en su defecto, al cuidador permanente. Así como cada estructura física requiere de una interacción para conformar diversos sistemas, el ser humano va creando sus propias redes de interacción que le permiten estar con el otro y la herramienta primordial para lograrlo, es definitivamente la Inteligencia Emocional.

Por otro lado podemos evaluar una afirmación que encaja de manera perfecta a los enunciados de la Psicología Positiva que recientemente se vienen fortaleciendo con evidencias científicas. Uno de los grandes físicos de nuestros tiempos es Albert Einstein por su teoría de la relatividad y ser considerado como el padre de la física moderna. No es fácilmente creíble que una persona dedicada a la experimentación haga la siguiente afirmación en uno de sus documentos: Existen dos formas de ver el mundo: Una en la cual no existen los milagros, y la otra como si todo fuera un milagro . No se esperaría que un físico como él, hiciera esta acotación que es de gran impacto en la vida emocional del individuo. Lo que en el fondo Einstein afirma, es que la manera como cada uno percibe el mundo es cuestión de decisión, es decir que está en nuestras manos. De nosotros depende las historias que nos contamos a nosotros mismos y las que compartimos con los demás. Dependiendo de la manera como argumentamos cada hecho podemos ver el cielo o el infierno. Esto nos lleva a poder concluir que parte de la felicidad es un ejercicio de argumentación, dependiendo de las explicaciones y significados que le demos a cada hecho vamos a crear un ambiente constructivo o destructivo. La terapia cognitiva nos lleva a entender como los significados y la manera como los reencuadramos para verlos desde diferente perspectiva, incide notoriamente en le tono emocional de la persona.

Finalmente me remonto a las tradiciones orientales entre ellas el Budismo que ha movido gran parte de las investigaciones de la neurociencia. Uno de los grandes pioneros es el neurólogo Richard Davison quien empezó a hacer los estudios con monjes tibetanos para hacer los estudios en laboratorio y entender que pasa en el cerebro cuando se experimentan diferentes emociones y las diferencias en los trazados cerebrales de las personas que meditan. Nosotros somos lo que pensamos . Todo lo que somos empieza con nuestros pensamientos. Con nuestros pensamientos, creamos nuestro propio mundo . Buda Es por esto que una misma situación puede ser experimentada por una persona como el cielo y por otra como el infierno. Dependiendo de que significado le asignemos se va a experimentar de una u otra forma.