El seguimiento una manera de afianzar el crecimiento humano
Se han dado cuenta que muchos de los conocimientos que adquirimos ya sea en el colegio, la universidad o en los innumerables seminarios y cursos que realizamos a lo largo de nuestra vida, se quedan como en el limbo? Que pasa con el gran presupuesto que invierten las organizaciones en capacitación?
En las empresas vemos como cada vez que los funcionarios asisten a una capacitación, salen plenamente motivados con la necesidad de hacer cambios y aplicar los nuevos conocimientos, es lo que se llama el “Honey moon effect”. Es claro que si no se hace alguna actividad de seguimiento y práctica organizada, los nuevos conocimientos se debilitan y vuelve a primar la información antigua o los hábitos viejos, hasta el punto que lo nuevo o adquirido recientemente, se diluye hasta que desaparece. Esto que pareciera no tener una explicación clara, lo podemos entender desde la neurociencia.
Mucho tiempo se creyó que lo que se olvidaba eran conceptos que no habían quedado muy bien estudiados y comprendidos. Cada vez que aprendemos algo o tenemos una experiencia novedosa, en el cerebro se crean redes neuronales diferentes, es decir, hacemos como una especie de mapa cerebral. Estos mapas también pueden verse como huellas que quedan en cerebro. Sin embargo, si estos mapas o huellas no son usadas de manera constante, estas se pierden, es decir se borran. El cerebro funciona con la premisa de “USE IT OR LOSE IT” de tal manera que lo que no se usa se descarta.
Cualquier cosa que queramos aprender, ya sea una destreza emocional, un concepto técnico, una habilidad deportiva, tiene que ser practicada en forma tal, que el cerebro pueda dejar su registro de manera permanente, en otras palabras, como un huella indeleble. Cabe anotar que después de que queda codificado y grabado con fuerza, ya no requiere de tanta práctica para volverlo sólido y además puede ser almacenado en el cerebro para cuando se necesite.
Por todo esto es que es importante que las empresas tengan presente, que para que la inversión que realicen en capacitación muestre ganancias duraderas, es necesario que las actividades tenga un proceso de seguimiento. Se requiere estimular tareas de práctica para que los nuevos conocimientos queden almacenados de manera adecuada y fortalecida. Es primordial que además del seguimiento, las empresas faciliten la generación de oportunidades de práctica en la cual los conocimientos queden aún más afianzados.
Si la capacitación de su empresa mantiene una coordinación entre los diferentes temas tratados, va a ser más fácil que un conocimiento adquirido facilite los que se van a aprender en los próximos seminarios. Mantener una adecuada secuencia de aprendizaje ayuda a que no queden cabos sueltos o conocimientos que se contradicen entre si. Mantener un significado de coherencia entre los temas incluidos en la capacitación, va a mantener su recurso humano motivado para encontrar sentido en su propio proceso de crecimiento.